Eneatipos y sus crimenes I

Nos embarcamos en el espeluznante terreno de la conjetura y el asesinato, esa parte de la psique humana mas oscura y psicótica, que nunca dejará de sorprendernos. En cada post relataré los mas oscuros aspectos de los eneatipos y sus características distorsionadas y mas enfermas.

 Mi intención con esta publicación no es perpetuar estereotipos, o de ninguna manera presentar a estas personas bajo una luz estética y sofisticada, sino mas bien, tener un espacio libre donde vaciar mis ideas. 

Por supuesto, todas los eneatipos son especulativos y no pretendo, aunque pueda parecer lo contrario, ofender a nadie con mis elucubraciones.

Te invito a analizar conmigo los diferentes personajes y sus rasgos y a concluir de que eneatipo se trata. Por supuesto, podemos diferir y es por esto, que puedes expresar tu desacuerdo en la sección de comentarios de abajo.  

Comenzamos con Inocencio III como uno de los grande exponentes de la inquisición y a su vez, el que le dio comienzo. En su biografía: "Elegido Papa a la muerte de Clemente III, en 1198, Lotario di Segni adoptó el nombre de Inocencio III e inició un pontificado que supuso el apogeo del absolutismo papal. Con el fin de salvaguardar la fe católica, no dudó en intervenir en la política de los diferentes reinos cristianos siempre que lo consideró oportuno. Así, en Bulgaria ungió como zar a Kalojan, fundador del segundo Imperio Búlgaro (1202); en Alemania, participó en la disputa por el trono del Sacro Imperio Romano Germánico, abierta a la muerte de Enrique VI (1197)." biografiasyvidas.com

En el anterior apartado podemos ver que Inocencio III sostenía el derecho de intervenir en la política de los países donde la fe católica era la norma. De hecho, algunas fuentes informan que fue el primero en auto-imponerse el título de "el vicario de dios". Podemos ver la tendencia a asumir la autoridad, de controlar y quedar por encima de personas que a su vez obstentan autoridad en su campo.  

Continua la misma fuente: "como cabeza espiritual de la cristiandad, Inocencio III predicó la Cuarta Cruzada (1202-1204), que, de estar dirigida en principio contra Egipto, fue desviada por los venecianos contra Constantinopla, ciudad en la que los cruzados fundaron el Imperio Latino de Constantinopla (1204). Inocencio III condenó esta acción, pero no vaciló en aprovecharla para intentar la sumisión de la Iglesia griega e imponer un patriarca latino en la capital bizantina. De forma paralela, el Papa favoreció una profunda reforma eclesiástica a través de la aprobación de nuevas órdenes religiosas, esencialmente urbanas, entre las que cabe destacar las órdenes mendicantes que seguían las enseñanzas de san Francisco de Asís: los franciscanos (1209) y las clarisas (1212)."

Así como promovió la limpieza de los herejes en las zonas donde la iglesia católica tenía potestad, también promovió reformas en el seno de la iglesia católica, como se indica en el apartado anterior. Podemos ver el sentido de derecho propio en el siguiente párrafo: "tuvieron que ver con la mentalidad de Inocencio su origen noble y su formación como teólogo y jurista especializado en Derecho Canónico. 

Así, consideró que la Iglesia Católica tenía la plena potestad ("plenitudo potestatis") sobre toda la Cristiandad. Basándose en el texto de Mateo 16,19 en que Cristo confiere las llaves del Reino de los Cielos a Pedro, afirmó la plena soberanía de la Iglesia incluso sobre el Emperador. Se reservaba Inocencio III intervenir en política cuando, a su juicio, hubiera razón de pecado ("ratione peccati") en el actuar de los príncipes, puesto que éstos estaban para velar sólo por el bienestar físico de sus súbditos, mientras que el Papa estaba para velar por la salvación de las almas, empresa ésta más valiosa que la primera en términos morales." wikipedia.com  

Para los siguientes ejemplos, me tomo la libertad de citar dos personajes de la ficción. El primero, el personaje ficticio de Christabella en la película de terror y fantasía Silent Hill. Christabella, como suma sacerdotisa de su culto, consideró a la pequeña alessa una bruja y la condenó a la hoguera, por haber sido concebida fuera del matrimonio. Podemos ver aquí la falta de compasión de este personaje, quien cree legítimo quemar viva a una pequeña niña, para ser purificada y así restaurar la inocencia en su santa lucha contra el demonio. Como bien dice luego de quemarla: "No llores por el demonio. Una vez mas estamos atrapados en una batalla sin fin. ¡Alabado sea Dios por nuestra lucidez! ¡Alabado sea el inocente por su sacrificio!

La letra con sangre entra, Francisco Goya (1780-1785)

Y el personaje de Claude Frollo, de la pelicula de disney el Hutchback of Notre-Dame, basado en la obra de Victor Hugo, Notre-Dame de paris. En la versión animada, Frollo expresa a la Beata María estar debidamente orgulloso de su virtud, pero al verse tentando por la gitana esmeralda, interpreta la lujuria desencadenada por ésta como obra del demonio. También se siente culpable por esto como demuestran la visión de unos monjes de rojo custodiándolo y rezando Mea Culpa; y expresa que el diablo es mas fuerte que el hombre. Finalmente, pide a Santa María que esmeralda sea de él, o que arda en la hoguera.   

Por supuesto, del eneatipo que hablamos, es el eneatipo 1. Y es precisamente en la imagen del cruzado donde se puede reflejar su lado mas insano, como dice Claudio Naranjo: "Una forma específica de crítica en el eneatipo I es el que se refiere al etnocentrismo y a otras formas de prejuicio, en cuyo caso se produce denigración, invalidación y el deseo de «refor­mar» inquisitorialmente a aquellos que constituyen un grupo di­ferente al de la propia raza, nación, clase, iglesia, etc."

En la ultima cita podemos ver también el complejo de superioridad y el sentido de bondad; y como esto se extiende a la propia raza, nación, clase y religión, etc; y considerando inferior, incorrecto o vil, todo lo diferente a ello. 

El calificativo de "virtud hipócrita", lo podemos ver en varios de los personajes, alguien que lucha en contra de la maldad, pero que esta dispuesta a ir a extremos como el asesinato masivo y el control excesivo, en los albores de esta lucha. También podemos ver que en ningún momento se cuestionan estas acciones; por lo cual, a veces se tilda  a este carácter de vehemente o de no dado al auto-cuestionamiento.  

Me atrevo a aventurar que la patología del 1, específicamente la que se expresa como virtud reformadora e institucionalizada, tiene que ver más con el subtipo social en su franja insana.