martes, 2 de agosto de 2011

Es complicado...


Hay una entrada en un blog llamado Chaman Urbano (creo que aparece en la barra lateral) que me ha llamado bastante la atención. El autor, que es un psicologo, trata de darle explicación a la promiscuidad excesiva que se da en el ambiente gay y el aparente miedo al amor.

Como he dicho en el comentario que publiqué en su blog, a mi no me parece que tenga que ver con tenerle miedo al amor y creo que la cosa es mas complicada.

Hay un termino que ultimamente se ha utilizado en psicología para padres que parecen ser distantes con sus hijos y este es: abandono emocional. Lo que mas me llamó la anteción fue que en la pagina donde leí la reseña, decía que los padres pueden tornarse distantes con sus hijos cuando sienten que estos no son lo que ellos esperaban; e inmediatamente se me vinó a la mente la imagen de un niño amanerado.

Por supuesto, no todos los gays sufren abandono emocional, pero esto puede ser una variante. Y creo que nos muestra el grado de abuso que viene desde la propia familia para alguien que no parece "desarrollarse" como debería.

Digo desarrollarse y no "con una orientación sexual diferente" porque creo que no es lo que hay en el "consciente colectivo"; la mayoría no ve la homosexualidad como algo innato, sino como algo que salió mal en la crianza: "salió marico" -se dice en mi país...

Entonces, a parte del riesgo de que el padre en cuestión llegue a tornarse distante al sentir que su hijo amanerado o diferente no es lo que él esperaba (cosa que me parece bastante cruel) también está el hostigamiento derivado de tratar de "acomodar" al niño en desarrollo.

Como he dicho, la homosexualidad se toma como algo relativo a un mal desarrollo; por eso en el pasado, por ejemplo, a los adolescentes que cumplían quince años, se los llevaba para que las prostitutas a "hacerse hombres"; quizá demasiado pronto y aquí tenemos una característica del machismo en general: un querer "hacer hombre" al niño en crecimiento tan pronto como sea posible.

Entonces mientras se trata de acomodar al niño en cuestión, se lo castiga con violencia verbal y fisica (quizá llegando a los golpes) y/o la ridiculización o quizá el menosprecio...

Y esto solamente contando a los padres y hermanos; sacando al entorno de la ecuasión que paulatinamente también se suma al abuso. Por supuesto, esto repercute en la auto-estima del niño; aunque obviamente sobregeneralizariamos al decir que todos los gays sufren de baja auto-estima.

Así las cosas y muchos de nosotros nos las arreglamos hasta llegar a la edad adulta. Con heridas que son tan antiguas, que es muy dificil recordar cuando empezaron exactamente. Por supuesto, este trato tan poco amoroso y estas heridas al auto-estima, solo parecen derivar en que experimentemos todo ese dolor o sentimiento de vacio como necesidad de amor y nos lanzamos a la busqueda compulsiva de este.

Sin embargo, hay un problema cuando uno tiene baja auto-estima o quizá al sentirse inferior; que uno no se concibe querido o quizá, al sobreponerse a esto conscientemente eligiendo conformarse, empieza lo que el autor del mismo blog llama "el pendulo maldito": una gran necesidad de amor, acompañada por una sensación de no merecerlo o de ser indigno de recibirlo. O, en el segundo escenario, al conformarse uno deliberadamente con la persona disponible, una paulatina despreciación de la misma.

Y es que claro, al sentirse uno no digno de amor, no puede pensar bien de la persona que lo quiere a uno... ¿que le ocurrirá en la cabeza? Puede preguntarse uno insconciente o implicitamente. Y esto se combina para dar lugar a todo lo que he descrito arriba: una busqueda de amor compulsiva que puede terminar siendo furtiva (porque cuando uno tiene una "sed" insaciable, no distingue bien la calidad de lo que se le ofrece, es decir, termina aceptando uno cualquier cosa que prometa calmarla) y si llega a terminos mas duraderos, puede complicarse con la sensación de no ser valioso (con todos los efectos que esto trae).

Por supuesto, creo que queda claro que la solución pueda recidir en sanar las heridas del pasado, pero es algo complicado, dificil y doloroso. No puedo dejar de simpatizar con el lector que, quizá luego de sentirse indentificado con todo lo que he descrito, piense que sería mas fácil si todo se solucionara con recibir amor... pero al parecer, las cosas son mas complicadas...

También hago la acotanción que hice al final del comentario sobre el cual escribo: todo lo que he dicho se fundamenta en lo que he visto en los demás y (como podrán haberse dado cuenta) en mi...