sábado, 23 de agosto de 2014

Como tomarse el eneagrama: guia para el eneatipo 4 (parte II)


El eneagrama es una herramienta de auto-conocimiento que nos invita a desarrollar una testigo interno y al mismo tiempo, cuestionar todos los supuestos y motivaciones que hemos tomado por verdaderas o validas hasta entonces.  Creo que es normal la reacción de volverse contra lo que uno ha hecho y criticarse y criticar al ego.

Sin embargo, la preocupación de esta publicación tiene que ver con la auto-critica en el contexto del eneatipo 4 en donde se puede volver auto-devaluación, siendo esto precisamente uno de los problemas del eneatipo. 


En el post pasado, yo explicaba mi experiencia y la de una comentarista en el blog pobre niño pijo,  al momento de descubrir su tipo y como habían sido nuestras reacciones. Ahora me concentraré en explicar mis experiencia ya entrado en el trabajo de auto-conocimiento: 

Luego de leer los eneatipos, llegué a la conclusión de que todos tenían por así decirlo, un lado oscuro. De este modo, dejé de sentirme tan culpable, porque a mi alrededor me llegaba el mensaje de: todos estamos bien, somos cuerdos y tu estas mal. Sentía mucha acusación de parte de mi entorno y yo no "los acusaba a ellos". 

Luego de dos años de conocer mas profundamente los eneatipos en la literatura cibernetica, leí el libro caracter y neurosis de Claudio Naranjo. Y si por ahí lo han calificado del vade-mecum del eneagrama, yo hice exactamente eso. Lo leí incontables veces (y todavía lo sigo haciendo), desesperado por encontrarle respuesta a mi inhibición y pánico a la burla, que para ese tiempo representaba un problema, pues estaba estudiando para ser profesor y me aterrorizaba pararme enfrente de los alumnos, temiendo que todos se fueran a burlar de mí. Además, en donde estudiaba, unas chicas se burlaban de mí y yo quería, a través del auto-conocimiento, lograr que eso no me mortificara tanto. 

Cuento mi motivación tras empezar el trabajo en mi mismo porque he de acotar que fue bastante intenso. Comencé un diario y trataba de escribir sobre las experiencias que tenía en el día a día, todos los días y de mi pasado, tratando de ponerle nombres a los sentimientos y tratando de entender para lo que en ese entonces definía vagamente como "vergüenza". No comencé con la meditación vipassana como lo aconseja el libro porque para ese entonces no comprendía su utilidad. 

Quizá algún día haga un post de la experiencias que tuve al cabo de siete meses luego de tan intenso trabajo, pero me concentraré en una experiencia que puede ser más común. Luego de cuatro meses, tratando de buscar pareja de manera vehemente (cosa común en los cuatro), fui rechazado muchas veces. Yo había estado trabajando con ahincó y disciplinadamente, casi rozando el masoquismo.

Como he contado, mi objetivo era no ser tan aprehensivo, tenso y escapista cuando me parara en frente de grupos de personas, pero eso solo era una cara de la moneda. La otra cara de la moneda, la motivación oculta tras el trabajo en mí (la cual me tomó algunos años en descubrir), era que yo quería convertirme en una persona mas "querible" y trabajar en mi auto-aceptación para que cuando una persona llegara, no terminar rechazándola o no ahuyentarla con una necesidad extrema. Creo que básicamente (y hasta hace poco) concebía así la felicidad: teniendo una pareja que me gustara a mi lado, que me hiciera sentir pleno, completo y "mojara" esa herida sedienta que había en el centro de mí.  

Sin embargo, luego de las experiencias de rechazo y tras compararme envidiosamente con alguien en mi entorno quien si tenía pareja y parecía feliz (una dos), me volví contra mi mismo. 

Envidiaba la cualidad de los 2 de no parecer tan necesitados y de esa manera conseguir el amor. En mi, la necesidad de amor era bastante evidente y sentía que eso terminaba por ahuyentar a los posibles candidatos. De alguna manera sentía que las personas que ya habían conseguido el amor, se sentían plenas, completas, sin sed y felices. Y envidiaba a las personas que podían conseguirlo con tanta facilidad. Sin pensar que quizá los que tenían pareja, se habían terminado por conformar con la persona con la que estaban y que no eran plenamente felices. 

Me sentí tan frustrado conmigo mismo, que me volví contra mi crianza, mi padre, la manera como habían surgido las cosas en mi vida que me habían convertido en esta persona sedienta, incapaz de conseguir el amor y que esto representaba el principal obstáculo para mi propia felicidad, que yo era el principal obstáculo para mi propia felicidad. 

Es fácil deducir que luego de esto me deprimí muchísimo. Basta con decir que fue en ese estado de cosas que entendí la letra de Rocío Durcal "prefiero estar dormida que despierta", pues dormido no pensaba tanto.

Creo que esta experiencia de frustrarse con uno mismo porque el cambio no se produce con la suficiente rapidez, puede ser común, pero puede que en el contexto del eneatipo 4 ese "frustrarse con uno mismo" pueda ir un paso más allá y llegar a la auto-acusación y la depresión. 

Espero que con esta historia, a la que algunos pueda parecer con "demasiada información", ayude a alguien que quizá en este momento blasfema contra el enegrama por estar sumergido en la auto-acusación y la rabia contra si mismo producto de la frustración. 

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