En algún lugar sobre el Arco Iris

De un tiempo para acá me estado preguntando ¿Qué pasará conmigo en el futuro? Verán, Venezuela es un país discriminatorio con los homosexuales. Si decides llevar una sexualidad tímida: sin caminar con tu pareja agarrada de la mano en la calle, sin besarla publicamente y en definitiva no ser abiertamente gay. PUEDE que te acepten, y eso en ciudades más o menos grandes porque en los pueblos ni hablar.

Ahora bien, creo que no soy la única persona que ha pasado por eso. Quiero decir, hay muchas personas como yo que han pasado por esto antes y hasta peor: como los transexuales, por ejemplo. Mi visión es: Si ellos pudieron, yo también. Si esas personas pasaron ya por esto y tienen una vida feliz con todo lo que un día quisieron, entonces si se puede.

En ese sentido, hay una mujer transexual que he tenido la oportunidad de escuchar varias veces y que me parece que habla con total acertividad. Ella es Tamara Adrián, quien es una abogada, activista de los derechos de la comunidad LGBTT en Venezuela.



Y aquí les dejo su biografía:


Aunado a esto, prosigo con una reflexión de un activista llamado Carlos Rivas, psicologo de la corriente humanista, que hace una reflexión de por qué en Caracas no hay un barrio gay.